jueves, 18 de junio de 2020

Jucantu y Cuvicente. Circular desde el Lago Ercina

Salida  y llegada: Campo la Tiese (Lago Ercina)
Distancia: 22,0 km
Duración: 10:00 h (sin paradas)
Subidas acumuladas: 1600 m
Altura Inicial: 1120 m
Altura máxima: 2015 m
Fecha de realización: 14/VI/2020
Dificultad: media-alta
Track de la ruta


Itinerario: Campo la Tiese (Lago Ercina) – Riega del Brazu – Las Bobias – Fuente la Canaleta – Las Reblagas – Las Campizas – Colláu el Jito – Vega de Ario – Colláu las Cruces – Jultayu – Arista del Jultayu – Collado – Cuvicente – Jou del Jultayu – Collado el Jito – Refugio de Vega de Ario – Jous de Ario – Jou Julagua – Moandiellu – Arnaedo – Parres – Colláu Cuencós – Majada Belbín – Cdo la Llomba – Campo la Tiese (Lago Ercina).

Cuando llegamos al Lago Ercina las nubes cubrían las cimas más altas del Cornión; más arriba, en el Collado el Jito subían desde el Cares tapando y descubriendo los Urrielles y, en las cimas del Jucantu y el Cuvicente, nos encontramos envueltos en la niebla unos momentos y en otros con ventanas por donde entrevemos los altos picos y el valle del Cares con Caín en caída vertical. Por la tarde la lluvia deslució el paso por Vega de Ario y las majadas de Moandiellu, Arnaedo, Parres y Belbín.
Las cimas emblemáticas del Cornión aparecen cubiertas de nubes al llegar al Lago Ercina.
Comenzamos la ruta siguiendo la marcada senda que conduce a Vega de Ario. Dejamos a la derecha el Lago Ercina y nos encaminamos hacia la Riega del Brazu donde dejamos a la izquierda la cabaña de La Veguina y las del Brazu. El camino embarrado nos sube por Cuenye las Bobias descubriendo con buena vista la cruz que corona la largada arista del Cantu Ceñal; el Cantu la Cuerria y El Empón avanzan hacia el sur y todo ello nos queda a la derecha.
Mirando hacia la derecha vemos el bosquete de La Joyosa y la larga arista del Cantu Ceñal. Al la izda se ve El Empón.
Cerca de la Majada de Las Bobias vemos El Empón (dcha), la Cabeza Jou del Agua de Cangas (centro) y Cruzalada (dcha).
Llegamos a la majada de Las Bobias donde nos reciben dos mastines y otros perros ladradores. Nos acercamos a la fuente y pilón de la Canaleta y bajamos unos metros por la apacible pradera antes de continuar la subida por La Canaleta mientras a la izquierda dejamos el valle y la majada de La Redondiella. La dura subida por Las Reblagas nos lleva a Las Campizas donde el terreno suaviza su pendiente.
Llegando a la Majada de las Bobias. Al fondo vemos la sierra que hay entre el Porru Mosquital y Cabeza la Forma; al otro lado está Vega de Ario.

Pasadas las primeras cabañas con el mastín aún ladrando echamos la vista atrás para ver el Cantu Ceñal.

Fuente de la Canaleta
Desde Las Reblagas miramos hacia atrás: a la derecha La Redondiella y en el centro Las Bobias.
Otra nueva subida por Las Abedulas nos lleva al Collado el Jitu donde se nos abre la vista hacia el Macizo Central y buena parte de las grandes cumbres del Occidental. El circulo de orientación nos ilustra sobre el nombre de las cumbres señeras. Dejo alguna foto.
Vista desde el Collado del Jito
Continuación de la panorámica anterior: Verdilluenga superpuesta con la Punta Gregoriana, Pico de los Cabrones y, ocultos tras las nubes, veríamos la zona de Torre de Sta María.
La idea inicial era ir desde el collado El Jito hacia el Jultayu por una senda hitada y hacer el regreso a Vega de Ario por el Collado las Cruces, pero la inercia nos llevó a hacerlo al revés. Así pues, continuamos hacia Vega de Ario y, sin llegar al refugio, seguimos por la senda hitada que avanza primero por la pradera y se mete después en el molesto lapiaz. Este camino lleva al Jultayu y a la Canal de Trea. Pronto llegamos al Collado las Cruces donde se divide: un ramal va hacia la canal mientras el otro se retuerce, bien hitado y con fuerte pendiente, por la ladera norte del Jultayu.
Vista panorámica hacia el este de Vega de Ario.
Los jirones de niebla nos envuelven a ratos pero la senda es clara. Cuando llegamos a la cima apenas vemos nada alrededor pero, como las nubes van y vienen, hay momentos en los que se abre el abismo de la cara sur del Jultayu y, en esos momentos, vemos Caín de Abajo y las cabañas de Caín de Arriba. El Macizo Central aparece y desparece al albur de las nubes y los mismo ocurre con las cumbres más cercanas del Cornión. En esta situación continuamos por la arista occidental del Jultayu camino del Cuvicente.
Hicimos la subida por el itinerario rojo y la bajada por el amarillo aunque habría sido mejor hacerlo al revés.
Cima del Jultayu cuando iniciamos el descenso por la arista.
Caín y Caín de Arriba desde la arista del Jutayu
Macizo Central desde la arista del Jultayu
La arista del Jultayu hay que seguirla con cuidado en algunos tramos: las caídas al sur son verticales y al norte tienen mucha inclinación por lo que en algunos momentos hacemos uso de las manos; en el tramo inferior encontramos un curioso "ojo". Alcanzado el collado que separa ambas cumbres y cuyo nombre desconozco, emprendemos la subida por una grieta hitada y muy inclinada pero sin ninguna complicación.
Vista hacia atrás de la arista del Jultayu por la que bajamos.
Curioso "ojo" en el tramo inferior de la arista del Jultayu.
Pasada la grieta, la inclinación se suaviza mientras atravesamos una zona de hierba. Llegamos al pedrero final que superamos mediante un par de quiebros dejándonos en la antecima. Todo el itinerario de subida está hitado. Los siguientes 5 metros a superar para alcanzar la cercana cima son muy expuestos: la grieta de la izquierda, aunque protegida, implica una pequeña trepada vertical sin agarres, y por la derecha, aunque hay agarres suficientes, las caídas son verticales de muchos metros. Paramos a comer.
Itinerario de subida al Cuvicente.
Tramo final muy expuesto del Cuvicente. Arriba se ve a un compañero que subió.
Podríamos bajar por el mismo itinerario al collado pero optamos por ir hacia la izquierda para aprovechar algo más el tramo de hierba. Da lo mismo. Nos dirigimos hacia el fondo del valle (Jou del Jultayu) pero, sin llegar a él, faldeamos el pico en llano para entroncar más adelante con el camino de subida al Jultayu. Como ya vinimos por este camino desde el Collado las Cruces, ahora vamos a seguir otra senda hitada que nos llevará hacia el noroeste, rodeando por la izquierda el Jou la Cistra, para alcanzar de nuevo el Collado el Jito. Pronto llegamos al refugio de Vega de Ario y, mientras tomamos unas cervezas, comienza a llover.
Itinerario aproximado de bajada del Cuvicente, buscando las franjas de hierba.
Aunque hay que pasar por alguna zona pedregosa la mayor parte de este itinerario de bajada hasta El Jito discurre por sendas claras.
Refugio de Vega de Ario
La lluvia arrecia y la niebla nos envuelve; guardo la cámara. Las fotos que pondré a continuación son de hace unos cuando seguimos parte de este camino viniendo de la Canal del Trea una vez y otra después de subir a la Cabeza la Verde (las describí en otras entradas de este blog). Salimos por detrás del refugio y cogemos (NO) la marcada senda con hitos que baja a Vega Maor por Moandi. A 1,5 kilómetros del refugio abandonamos la senda hitada y cogemos otra menos marcada y con pocos hitos que avanza por franjas de hierba y baja al Jou de la Canal. Aquí viramos a la derecha (E) por la amplia pradera para bajar al cercano Jou Julagua y rodear un peñascal. Retomamos después la dirección noroeste. En todo este tramo y hasta que lleguemos a Arnaedo tenemos que hacer un uso intensivo del GPS porque la niebla nos envuelve y la lluvia azota; además, las piedras mojadas y el barro resbalan. Pasamos junto al Collado el Burro y bajamos al pequeño jou de hierba de La Almorzal donde se ubica la majada de Moandiellu. Como ya está cerca Arnaedo continuamos de frente por una zona algo escabrosa y finalmente bajamos a esa grande y hermosa majada.
Cabañas en Arnaedo
 En Arnaedo seguimos la marcada senda, asiento del GR-202 Ruta de la Reconquista, que nos lleva a pasar al lado de la hermosa majada de Parres. Una fuerte bajada por una senda embarrada nos lleva a Los Cuencos donde encontramos algunas vacas y un toro. La niebla a quedado arriba y la lluvia amaina. Podemos ver ya el camino ancho que nos llevará a la majada de Belbín.

Majada de Parres
A la dcha se vería la foto anterior con la Majada de Parres. La senda va por las zonas marrones (helechos en otoño), pero el GR rodea la peña del centro de la foto por la izda.


Majada de Belbín
En la majada Bebín cogemos la conocida pista que nos sube al collado La Llomba y un poco después la abandonamos para bajar directos al Lago Ercina.

Lorenzo Sánchez Velázquez

miércoles, 3 de junio de 2020

Peña Redonda. Circular alargada desde El Pino

Salida  y llegada: Molino de Peón (El Pino, concejo de Aller)
Distancia: 22,0 km
Añadir leyenda
Duración: 9:00 h (sin paradas)
Subidas acumuladas: 1750 m
Altura Inicial: 650 m
Altura máxima: 1836 m
Fecha de realización: 30/V/2020
Dificultad: media-alta
Track de la ruta



Itinerario: Molino de Peón (El Pino) – Ruta PR AS-31 (Foces del Pino) – Foces del río Pino – Desvío a Peña Redonda – Valle y Mayéu Fondil – Canal de los Agriles – Peña Redonda – Collado – Peña Caniecha – Collado Caniecha – Mayéu Caniecha (Glayiru) – Valle Caniecha – Desvío hacia el Valle Pedroso – Las Cuevas – Valle y Mayéu Pedroso (PR AS 31.1 Foces del Pino-Cuevas) – Collá Cavera – Collado Pandos – Los Gallos – Reguero Melera – La Melera – Área recreativa de Cuevas – Felechosa – Molino de Peón (El Pino).

Como la ruta iba ser muy larga preferimos aparcar en el Molino de Peón en lugar de hacerlo en El Pino para, de esta manera, ahorrarnos el kilómetro de asfalto. Comenzamos la ruta cruzando el río y siguiendo las indicaciones de la conocida Ruta de las Foces del Pino (PR AS-31). Tras caminar plácidamente 3 kilómetros disfrutando del murmullo del agua, bajo el frondoso y fresco dosel del bosque que mitiga las altas temperaturas de este final de mayo, alcanzamos las cortas y hermosas foces por donde el agua se despeña produciendo pequeñas cascadas y rápidos.
Molín de Peón y Río Pino

Tramo empedrado del camino hacia la Foz del río Pino
El desfiladero se abre a tres valles: el del Pedroso hacia el este por que el subiremos en el regreso para ampliar el recorrido, el de Caniecha que sube hacia al sur (por él subimos hace unos años para alcanzar la cima de La Cabritera) y el del Fondil por el que seguimos hacia el suroeste (una indicación señala a Peña Redonda).
Esta foto sacada desde el Valle Pedroso muestra el itinerario seguido por el Valle Fondil hasta la Canal de los Agriles. En la canal nos pegamos a la pared de la derecha evitando el pedrero.
La senda avanza entre el arbolado que delimita los prados del Mayéu Fondil y más arriba, en medio de un bosquete, la perdemos definitivamente continuando por la empinada pradera donde buscamos los tramos de menor pendiente. En la zona alta, y antes de llegar a la Canal de los Agriles, nos escoramos a la derecha para avanzar casi pegados a los canchales que vierten los verticales muros de la larga arista de la Peña Panda. De este modo entramos en la canal pegados a la pared rocosa de la derecha evitando el molesto pedrero que la rellena. Así, pegados a la pared, subimos duramente por una marcada senda. Cuanto más subimos mayor es la pendiente.
Canal de los Agriles. Por la franja de hierba pegada a la pared de la derecha va la senda.
En la zona alta, la canal de divide en dos: la de la derecha parece más inclinada pero tiene agarres y una cuerda, la de la izquierda, también muy inclinada, es de hierba y como está seca, optamos por subir por ella (no la recomiendo si la hierba está mojada). Superadas varias repisas nos situamos en una horcada que nos ofrece el horizonte occidental. No queda más que subir unos metros y nos encontramos en la arista cimera y enseguida en la propia y alargada cima de Peña Redonda.
En la zona alta, que vemos al fondo, la Canal de los Agriles se divide en dos: seguimos por la de hierba a la izquierda (se intuye a la izda de la peña que separa ambas canales).
Desde la cima abarcamos unas vistas extraordinarias en todas las direcciones: Fuentes de Invierno (Jeje o Xexa, Nogales), Altos de Riopinos (Melera y Cabritera), Puerto de Vegarada y Cordillera Cantábrica (Fitona, Pico Faro, Quemaona y Mediodía), Valle y aldea de Rioaller, continuación de la cordillera con el Pico Torres; desde el Retriñon y La Forá hasta el Cuchu y La Forcada; Peña Mea y Peñas Negras y abajo, en el valle del río San Isidro, la aldea de El Pino. Dejo algunas fotos.




Después de reponer fuerzas disfrutando de estas extraordinarias vistas desandamos la arista y bajamos al cercano collado por donde subimos. Sin senda ni camino ni marcas, descendemos por la amplia y empinada ladera opuesta (SO) escorándonos hacia la Peña Panda para suavizar la pendiente. Unos metros más abajo seguimos derechos por una incipiente riega hasta dar con una sendilla transversal que, a media ladera, faldea en ligero ascenso. No es preciso bajar hasta la marcada senda que se ve abajo pues esto nos obligaría a remontar después hasta el collado que separa Peña Redonda de Peña Caniecha al sureste. Por la citada sendilla vamos rodeando los farallones verticales de Peña Redonda hasta el citado collado.
Peña Panda desde la arista de Peña Redonda. Bajamos hasta el collado que las separa. Por la canal de la derecha subimos y por la de la izda, más amplia y fuera de foto, bajaremos.
La marcada senda que encontramos en el collado faldea por el norte la Peña Caniecha por encima del collado Palmián y nos deja en una pista que enseguida baja al collado Caniecha. En realidad hemos dado un rodeo pues podríamos haber bajado directamente por la Majada Palmián al camino del Valle Caniecha.
Vista atrás de Peña Redonda. El collado de hierba separa esa peña de la Peña Caniecha y a él hemos llegado faldeando la Redonda por debajo de las peñas de la izquierda.
Vista hacia atrás de Peña Redonda. El Canal de los Agriles queda entre la peña y el crestón de la derecha que viene de Peña Panda.  A la izda la modesta Peña Caniecha y el collado de donde venimos.
Abajo vemos la majada y el collado Palmián, al fondo el Retriñón por encima del Pico Pandos (a la dcha de éste se ve el Collado Cavera de hierba por donde pasaremos) y a la dcha los Altos de Riopinos. La senda sigue entre algunas matas de escobas a la derecha fuera de foto y baja al cercano Collado Caniecha.
En el collado Caniecha viramos 180º para dirigirnos al norte hasta la cercana majada homónima que tiene varias casas arregladas y en uso. La senda continúa recta por el fondo del valle Caniecha confundiéndose con la propia riega. Más abajo nos sumergimos en un tupido bosque mixto que nos protege del inclemente sol que nos ha agobiado todo el día.
Bajando por el Valle Caniecha (zona alta).
Como la ruta se nos quedaría algo corta si bajásemos directos a las Foces del Pino, decidimos alargarla por el Valle Pedroso para bajar después a Cuevas. A los dos kilómetros del collado Caniecha abandonamos la marcada senda para coger otra a derecha, apenas perceptible en su arranque y casi oculta por el escobar en los primeros 10 metros. Pronto la encontramos más marcada y limpia y nos lleva a cruzar la estrecha hendidura de Las Cuevas dando acceso a la zona media del Valle Pedroso.
Zona baja del Valle Pedroso y las Foces del Pino. La foto está tomada nada más pasar la hendidura de Las Cuevas. Al fondo el Pico Cueto.

Zona alta del Valle Pedroso con la Peña Pandos detrás y el collado Cavera oculto tras el árbol.
Peña Redonda (izda) y Peña Panda (dcha) con el Canal de los Agriles en medio. Foto sacada desde el Valle Pedroso y muestra por donde subimos.
La senda llanea hacia la mitad del Valle Pedroso donde encontramos otra senda con las marcas del PR AS-31-1 Foz de Pinos-Cuevas que nos permitirá subir unos 250 metros, pasando por la Majada Pedroso y dejándonos en el Collado Cavera. Está situado entre la Peña Pandos y los Altos de Riopinos y después de las fotos de rigor lo dejamos para continuar en llano hasta el cercano Collado Pandos que deja a la izquierda la vertical Peña Melera. La vista se abre hacia el Valle de San Isidro con el pico Torres y la Sierra de Ajo (ver foto de más abajo).
Zona alta del Valle Pedroso con la majada homónima. Arriba se ve más cerca la Collá Cavera.
Peña Melera desde la Collá Cavera. En llano avanzamos hasta el Cdo Pandos apenas visible a la dcha.
Desde el Collado Pandos tenemos esta vista hacia San Isidro cuyo puerto está oculto tras el Monte la Llana.
La senda, marcada con las señales del PR, baja pegada a las verticales paredes de Peña Melera y pronto vira a la derecha para hacer un descenso más tendido por las cabañas de Los Gallos que se ven perfectamente desde el collado. Rodeamos primero un prado con cabaña por la derecha y un poco después otra cabaña en uso con prado por la izquierda para bajar después más directos durante un corto tramo por el Reguero Melera.
Vemos la senda vira de dcha a izda alrededor de la cabaña y Prado de Los Gallos. Enseguida se rodea otro por la izda antes de adentrarnos en el tupido y limpio hayedo.
Nos adentramos en un precioso hayedo limpio y por él bajamos mientras la marcada senda se retuerce a la vez que nos lleva a pegarnos otra vez al crestón que baja de Peña Melera. Muchos metros bajamos pegados a las verticales paredes admirando la fortaleza de algunas hayas que medran en las grietas de las verticales peñas.
La senda baja pegada a las verticales peñas que vienen de Peña Melera, mientras a la dcha se extiende el hayedo.
Desde el collado Pandos hasta que llegamos al fondo del valle (río San Isidro) hemos bajamos algo más de 700 metros. Salimos a un camino ancho que enseguida nos deja en la carretera AS-253 (la que va al Pto de San Isidro) justo enfrente del Puente de la Muñeca.
Río San Isidro desde el Puente de la Muñeca
Aún nos quedan 2,5 kilómetros para llegar a Felechosa y otro más para el Molín de Peón donde tenemos el coche. Como nos habíamos quedado sin agua en la bajada y el calor ha apretado mucho todo el día, antes de seguir la ruta, nos acercamos a la cercana fuente y área recreativa de Las Moyás donde aplacar la sed y coger agua. Después, cogemos el camino ancho, casi totalmente hormigonado, que va por la margen derecha del río San Isidro, pasa junto a una piscifactoría en uso y deja a un lado y otro cabañas de uso ganadero unas y acondicionadas como segundas residencias la mayoría. Llegamos a Felechosa.
Precioso camino que une Felechosa con el Molín de Peón
En el centro de la aldea cruzamos la carretera y el río para coger un camino protegido con vallas de madera que avanza casi llano en medio de un precioso bosque y nos deja en el Molín de Peón.

Lorenzo Sánchez Velázquez