sábado, 27 de enero de 2018

Carba de Fusneo y La Portiecha. Circular desde Xomezana Riba

Salida: Jomezana de Arriba (Xomezana Riba) (Concejo de Lena)
Distancia: 16,5 km
Duración: 7:00 h (sin contar paradas)
Subidas acumuladas: 1250 m
Altura Inicial: 720 m
Altura máxima: 1605 m
Fecha de realización: 20/I/2017
Dificultad: media
Track de la ruta

Itinerario: Jomezana de Arriba (Xomezana Riba) (Lena) – Desvío por Senda de Valseco – Reguero Conforcos – Las Bobias – El Pividal – Alto de la Portilla – La Carba de Fusneo – Veiga Fuentes – Peña la Portiecha – La Primaliega – El Cabril – El Felechal – Cordal – Mayaón – Vigaeros – Barranco de Xomezana – Xomezana Riba.

Cuando en Campomanes comienza la subida por la autopista de peaje AP 66, despunta a la derecha una solitaria y piramidal montaña por delante de la cordillera. Es la peña La Portiecha que desde esta perspectiva parece solo apta para la escalada; tan esbelta, tan visible y tan desconocida. Sin embargo, es una peña que se sube sin problema por su amplia arista suroriental. La ruta, además, nos va a permitir coronar la alomada Carba de Fusneo y visitar algunas brañas y puertos haciendo un recorrido circular desde Jomezana.
Peña la Portiecha y Barranco de Jomezana
Aparcamos en la preciosa aldea lenense de Xomezana Riba con sus antiguas casonas (El Corralón, la Rectoral), la iglesia de San Pedro (con portada medieval del siglo XIV y resto del siglo XVIII, restaurada en los siglos XIX y XX) y su rico patrimonio etnográfico en el que destacan sus hórreos y paneras en uso, algunos molinos y el lavadero situado en el centro de la aldea. Por aquí pasan dos rutas de montaña que seguiremos en algunos tramos: la Ruta del Valle de Jomezana (PR AS-89) y la Ruta de los Vaqueros (PR AS-232).
Hórreo en Xomezana Riba
Lavadero en el centro de Xomezana Riba
Comenzamos a caminar subiendo por la calle principal que pronto deja a la derecha el desvío que nos llevaría a la Iglesia de San Pedro (queda pendiente para otro día). Arriba, la ancha pista gira a la izquierda para continuar definitivamente hacia el oeste por el valle o barranco de Jomezana. Desde la misma aldea y en todo el recorrido, destaca al sur la afilada cumbre de La Portiecha que a medida que avanzamos nos va mostrando su alargada cresta meridional. El valle finaliza en los puertos donde se asientan las brañas de Las Bobias y el Pividal, puertos a su vez encerrados por la alomada Carba de Fusneo, la piramidal caliza de Peña Foxón y el extremo oriental de la también alargada mole calcárea de la Carba de Valseco. Un gran bosque rellena el fondo del barranco y toda la ladera oriental del valle (bajo La Portiecha y la Carba de Fusneo), quedando los prados, praderas y cabañas en la occidental o en la cabecera. En este tramo coinciden los PR 89 y 232.
Peña la Portiecha, Carba de Fusneo y Peña Foxón que cierran el Barranco de Jomezana
La pista ancha y hormigonada avanza por el valle de Jomezana. Al fondo Peña Foxón y Carba de Valseco.
Cuando la pista da la primera revuelta a la derecha para subir a las brañas de Conforcos y El Ventanosu, la abandonamos para seguir por el camino de frente (hay un poste de señalización que marca el PR AS-89). Este, todavía ancho, gira pronto a la izquierda para bajar al fondo del barranco y continuar por él hasta El Pividal en la cabecera del valle. Dudamos de seguir por él o continuar de frente (está señalizado) por la Senda de Valseco que, a media ladera, recorre también el valle hasta su cabecera. Nos decidimos por la última opción por tres motivos: está más despejada de arbolado y permite continuar disfrutando del paisaje (el camino ancho del fondo se sumerge en el bosque y las vistas son escasas), es una senda y, además, por aquí va el PR AS-89.
Senda de Valseco
La senda cruza el reguero de Conforcos y un crestón calizo en donde han colocado una rústica portilla. Después, remonta duramente en paralelo a otro crestón y es aquí donde encontramos los restos del primitivo empedrado que debió tener este camino que comunicaba Jomezana con los amplios pastos de Valseco entre los picos Tapinón y Carva de Valseco. Al final de la cuesta sale otra senda, que remonta hasta la Braña de Miramanes donde enlaza con la ancha pista que dejamos antes. Nuestra senda faldea en ascenso la ladera con evidente falta de desbroce entre cotoyas y zarzas, aunque se pasa bien. Después de dejar atrás otros dos crestones que, como las anteriores, bajan transversales como costillas sobre la ladera, desembocamos en un la Braña las Bobias, hasta donde sube el camino ancho que avanza por el fondo del valle. Una cabaña y varios prados quedan a la izquierda del camino, mientras que por la ladera opuesta se extiende un hermoso bosque dividido en dos perfectamente delimitados: un hayedo en la zona más baja y un acebal que se extiende hacia los puertos que cierran el valle.
La Senda de Valseco conserva unos pocos tramos de empedrado
Después de cruzar varios crestones la Senda de Valseco en perfecta traza faldea la sierra hacia los puerto que se ven al fondo. Limitados por Peña Foxón y la Carva de Valseco.
Cabaña en Las Bobias. Por detrás el extremo oriental de la Carva de Valseco.
Entre esta braña y la siguiente de El Pividal encontramos prados y cabañas en aparente buen estado. Después del último prado con cerca de piedra del Pividal, se extienden los amplios pastos del puerto y, en medio de ellos, han restaurado recientemente una pequeña cabaña que, más bien, parece refugio de montaña.
Brañas del Pividal y puertos. Por detrás, Peña Foxón.

Cabaña en el Pividal. Por detrás Carva de Valseco.

Pequeña cabaña recién restaurada en las camperas de Pividal. Por detrás, la Carva de Valseco
 Avanzamos por la campera en dirección al Alto de la Portilla. En el último tramo, el más inclinado, la senda se retuerce entre manchas de nieve y algunos acebos, hasta alcanzar al alomado Alto de la Portilla entre la piramidal Peña Foxón y La Carba de Fusneo. Se abre el horizonte sur (picos La Almagrera, La Mesa, Las Planas y La Tesa) y el también el suroccidental (Peña Cerreos y Peña Ubiña). La traza del camino que viene de Tuiza Riba y que se dirige a los pastos de Valseco se dibuja con nitidez en la fina capa de nieve mientras rodea la Peña Foxón.
Alto de la Portilla entre Peña Foxón a la derecha y Carba de Fusneo a la izda (no se ven en la foto)
Vista atrás desde la subida al Alto de la Portilla. Barranco de Jomezana y Brañas del Pividal.
Alomada Carba de Fusneo poco antes de llegar al Alto de la Portilla

Cruce de caminos en el Alto de la Portilla. Al fondo la alargada cima de la Carba de Valseco
Desde el Alto de la Portilla. Peña Castiellu (izda) y, al fondo, Peña Cerreos. Peña Ubiña quedó oculta por la nubes a la derecha de la foto.
Abandonamos las marcas de los PR (el 89 baja a Tuiza a través del Collado del Viso, mientras que el 232 rodea la Carba de Fusneo hasta Veiga Fuentes) y nos dirigimos monte arriba hacia la cumbre más alta del día, la Carba de Fusneo. Enseguida y con poco esfuerzo alcanzamos la cima situada sobre uno de los pequeños crestones calizos que cortan transversalmente la montaña. Se ha levantado un viento frío y desapacible que no invita a quedarse mucho tiempo allí.


Alto de la Portilla, Peña Foxón y Tapinón desde la Carba de Fusneo

Bajando por la ladera oriental de la Carba de Fusneo hacia Veiga Fuentes con la Peña Portiecha al otro lado.
Seguimos hacia el este superando otro crestón calizo para emprender después un pronunciado descenso en paralelo a otras afloraciones calizas hasta alcanzar los pastizales de Veiga Fuentes. A la derecha queda la modesta, desde aquí, Peña Cornechana que cae muy vertical al otro lado, al sur, sobre los prados y cabañas de El Pandiechu.
Subiendo a La Portiecha echamos la vista atrás: Veiga Fuentes, Carba de Fusneo, Peña Foxón y Tapinón.
Otra vista atrás desde cerca de La Portiecha: Peña Cornechana y, cerrando, La Tesa, Las Planas, La Mesa y La Almagrera.
De nuevo comenzamos a subir por una senda que cruza primero el pastizal y después una zona invadida por la cotoya hasta situarnos a los pies de la Peña la Portiecha. Una corta y sencilla canal nos sitúa en una alargada y ancha hondonada herbosa, Río Ciminu, que se estrecha en el roquedal. La sendilla hitada permite pasar entre los bloques de caliza que apenas dejan entrever las impresionantes caídas a ambos lados. No ofrece ninguna dificultad pero tampoco hay que descuidarse. El sendero nos ayuda en el montículo cimero que desde lejos parece complicado y no lo es. Encontramos una cruz antigua hecha con hierros de ferralla que se ha desclavado y alguien la ha asegurado invertida y un buzón cilíndrico más moderno.
Pequeña canal de subida a La Portiecha
Otra vista atrás desde La Portiecha: prados y cabañas de Ordiales y Pandiechu. La Mesa, La Almagrera y Puerto el Palo.
Vista atrás desde la crestería de La Portiecha.
Grandes bloques de caliza que hay que bordear para alcanzar la cima de La Portiecha, cuyo antigo buzón ya vemos.
 Vistas sobre el valle del Huerna con la AP-66 zigzagueando por la ladera de la Sierra de los Llanos de Somerón. Sierras y montañas del centro de Asturias: Carrocedo (La Carisa), la Sierra de los Llanos de Somerón al este; la del Cuito Negro, la que contiene Las Terratientas, La Tesa, La Mesa y La Almagrera, al sur; le siguen Peña Cerreos y Peña Ubiña; al oeste alineadas La Carba de Fusneo, Peña Foxón y el Tapinón; a su derecha la Carva de Valseco. Hacia el norte y noreste encontramos las aldeas de Piñera cortada en dos por la autopista, las dos Xomezanas y, más lejos, Brañavalera. La vista alcanza incluso hasta las chimeneas de la central térmica de Aboño cerca de Gijón.
Cima de La Portiecha. Por detrás vemos el Cordal de los Llanos de Somerón y el Cordal de Carrocedo.
Valle del Huerna y autopista AP-66. El puerto de Pajares se ve hacia la izquerda
Cima de La Portiecha. Vistas entre el Puerto el Palo y la Ubiña (oculta por las nubes).

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Desde La Portiecha: Carba de Fusneo, Peña Foxón y Tapinón (casi oculto por las nubes). A la derecha Braña de Pividal.
Como el viento sopla del oeste paramos a comer protegidos en una pequeña repisa de la cara este. Reanudamos la ruta desandando la alargada arista de la montaña y bajando la corta canal. Después viramos al sur para continuar el descenso en paralelo al roquedo por un terreno invadido por la cotoya, que se cruza bien, hasta enlazar de nuevo con la senda marcada del PR AS-232 que nos encamina hacia el noreste completando el rodeo de la alargada peña. Enseguida nos topamos con el muro del primer prado de La Primaliega que bordeamos por arriba. Otras cabañas y prados se suceden a nuestra derecha mientras la gran mole caliza va quedando atrás a la izquierda.
Bajando el montículo cimero de La Portiecha.
Aspecto de la bajada, para rodear La Portiecha (se pasa bien). Vemos Peña Cornechana y Carba de Fusneo.
Prados y cabañas de La Primaliega con Peña la Portiecha detrás. El camino rodea los prados por arriba.

En las cabañas y fincas de El Cabril la senda tiene continuidad en un ancho camino terrero y comienza el fuerte descenso. Los prados con cerca de piedra y las cabañas se suceden a un lado u otro: El Felechal, Cordal, Mayaón son algunos de sus nombres.

Cabaña en El Cabril, donde enlazamos con un camino terrero ancho.

Cabaña en El Mayaón.

Imagen del camino por el que bajamos, antes del desvío hacia Xomezana Riba
En el Mayaón el camino se bifurca: la pista principal que sigue de frente lleva las marcas del PR y, después de varias revueltas, finaliza en Xomezana d’Abaxo; el nuestro sale a la izquierda y se adentra en un denso castañar con viejos y gruesos ejemplares. Pero a la derecha quedan aún los prados y cabañas de Vigaeros, mientras que a la otra mano el frondoso bosque rellena completamente la ladera. Encontramos este tramo completamente embarrado e invadido en algunas zonas por el arroyo; se hace pesado. El pronunciado descenso finaliza en el puente que atraviesa el Barranco de Xomezana. Allí mismo se puede visitar el Molín de Pedreo, uno de los muchos que cubrían el curso del caudaloso regato. Aprovechamos para quitarnos el barro de las botas.
Xomezana Riba. Al fondo a la derecha vemos Brañavalera.
Aunque este tramo del camino hacia Xomezana estaba bien, la mayor parte estaba embarrado.

Cabaña y Prado de Vigaeros.

Cerca de Xomezana Riba y antes de cruzar el barranco para subir después a la aldea.

Molín de Pedreo en el arroyo del Barranco de Jomezana
El camino sube entre prados con algunas ovejas custodiadas por perros ladradores y finaliza en Xomezana Riba justo en la plaza donde hemos aparcado el coche y donde, además, hay un grifo donde limpiar bien las botas.

Lorenzo Sánchez Velázquez





















jueves, 25 de enero de 2018

Peña Collada. Circular desde Las Ventas

Salida y Llegada: Las Ventas (Concejo de Proaza) 
Distancia: 15,5 km
Duración: 6:00 h (sin contar paradas)
Subidas acumuladas: 990 m
Altura Inicial: 330 m
Altura máxima: 1104 m
Fecha de realización: 14/I/2017
Dificultad: media
Track de la ruta

Itinerario: Las Ventas (Proaza) – Senda del Oso – Valle la Rebollosa – Collado Oliz – Reguero Mingoyo – El Colladín (Collado Mingoyo) – Majada Mingoyo – Majada la Espina (Brañas de Zarameo) – La Cochadiella – Collado y Majada Michandoiro – Peña Collada (Rebollosa) – Michandoiro – La Cochadiella – Braña la Collada (Gromolateicha) – Arroyo de San Martín – Santa María – El Toral – Las Ventas.

La sierra cuarcítica de Peña Collada está rodeada por otras de naturaleza caliza como la Sierra de Peña Gradura, la del Gorrión o la de Caranga que son extensión natural o se desgajan hacia el norte de la extensa Sierra de Sobia. Escarpada y tapizada por un tupido brezal, la Peña Collada ofrece unas vistas espectaculares de las montañas, valles y aldeas que la rodean; en su extremo septentrional se encuentran los restos de un castro que no llegamos a visitar.
Peña Collada. Foto tomada durante la subida por el valle Mingoyo
Las Ventas es una pequeña aldea casi deshabitada del concejo de Proaza situada en la carretera AS-228 (carretera que va a San Martín de Teverga). Aparcamos junto al desvío hacia Bustiello y Fabar, y comenzamos la caminata cruzando el río Teverga por el puente que lleva a las citadas aldeas, para seguir después por la “Senda del Oso” que se solapa con la propia carretera. Enseguida abandonamos la carretera para seguir el antiguo camino ferroviario que discurre en este tramo por la margen izquierda del río. Pronto lo cruzamos por un húmedo y resbaladizo puente metálico para sumergirnos en una corta y estrecha foz formada por los escarpes verticales de la sierra de Peña Collada.
"Senda del Oso" con el río Teverga
Carretera AS-228, río Teverga y "Senda del Oso" en el desfiladero que forma Peña Collada, a la derecha.

Al otro lado del crestón rocoso que forma la foz se abre a la derecha el valle de La Rebollosa por donde vamos a subir. La pista, hormigonada y señalizada con un poste de una ruta para BTT, remonta hacia el sur en medio de un pinar que rellena completamente el valle. Varias revueltas y 400 metros de subida nos llevan al collado Oliz que da acceso al valle de Zarameo. Este collado se sitúa entre la imponente y vertical mole de Peña Collada a la derecha y la pequeña pero afilada cumbre de Los Neninos. A una corta bajada le sigue una dura subida por otra pista hormigonada, mientras, por la izquierda, enlaza con la que viene de Caranga.
Pista hormigonada que nos saca de la Senda del Oso y poste de señalización de una ruta BTT
La pista remonta el valle La Rebollasa reconvertido en pinar.
Llegando al Collado Oliz
Un primer cruce del arroyo Mingoyo nos sumerge en el propio valle por donde sube un camino terrero que vuelve a cruzar y descruzar el arroyo para situarnos en el precioso Collado Mingoyo o Colladín. Las Sierras de Caranga, de Tene, parte del Aramo y la del Gorrión se abren desde los pastos de esta atalaya; pero el día está nublado y las nubes nos ocultan las cumbres por encima de los 1500 metros (el Aramo).
Primer cruce del Arroyo Mingoyo

Desde el collado Mingoyo o Colladín vemos la Sierra del Gorrión con el Pico Mayor sobresaliendo a la izquierda.

Peña Collada y collado Michandorio. Foto tomada desde el collado Mingoyo o Colladín
Mantenemos la dirección sur para bajar a la pradera de la Majada Mingoyo con una solitaria cabaña en buen estado a la sombra de un original fresno. En esta zona de hierba el camino parece perderse, pero se recupera fácilmente al otro lado para continuar la subida dando después un quiebro hacia poniente y encaramarnos sobre otro hombro de la sierra. Un corto desvío a la izquierda nos lleva a visitar la Majada la Espina o Braña de Zarameo con algunas cabañas en ruinas mientras se están arreglando otras.
Solitaria cabaña en la Majada Mingoyo
Cabaña en la Majada la Espina o Braña de Zarameo.
Un extenso acebal cubre la ladera oeste que avanza hacia la Sierra de Sobia

Desde el montículo que protege la braña del frío norte tenemos unas vistas espectaculares de Peña Collada y del camino ancho que nos llevará hasta su base. Mientras va rodeando la cabecera del valle Mingoyo, vira la dirección oeste por la norte para situarnos al cabo en el cruce de caminos del collado La Cochadiella. Hacia el norte sigue el que lleva al collado Michandorio en la base de Peña Collada y más allá a bajar por la moderna pista a la aldea de Santa María, hacia poniente salen dos caminos que recorren a mayor o menor altura el lomo que separa el Valle de San Martín del de San Esteban para finalizar también en Santa María.
Desde la Braña la Espina tenemos esta magnífica vista de Peña Collada y el collado Michandorio

Peña Collada desde el collado La Cochadiella. La senda de subida está en la amplia vaguada de la izquierda.

Bajamos unos metros a los prados y cabaña de Michandorio. La parte inferior de Peña Collada tiene unas verticales peñas cortadas a tajo como dientes afilados y entre sus intersticios medran densas matas de brezo que impiden el acceso. Las rodeamos por la izquierda siguiendo los prados hasta dar con una amplia vallina, también colonizada completamente por el brezo. Por allí sube una incipiente senda que recientemente han desbrozado apenas pero que nos ayudará considerablemente en la progresión.
Subiendo a Peña Collada por el tupido brezal. Una pequeña senda nos ayuda en la progresión

La subida es dura y, sin la sendilla, difícilmente hubiésemos podido alcanzar la cima; tan tupido y alto está el brezal. Cuando estamos llegando a la arista de la montaña vemos un nutrido grupo de montañeros que vienen por detrás y parece que siguen nuestro itinerario. Más tarde, cuando estamos arriba, nos dicen que son del G.M. Pico Urriellu de Gijón y, si no entendí mal, algunos miembros del grupo habían desbrozado la subida unos días antes.

Vista atrás desde la subida a Peña Collada: collados Michandorio (del que sale la pista que obviaremos en la bajada) y La Cochadiella; con nieve el acebal próximo a la Majada Espina y, al fondo, la Sierra de Sobia.
En la cima hay un pequeño buzón de montaña. Las vistas comprenden todos los picos y sierras antes mencionados. El valle de Zarameo avanza hacia noreste hasta desembocar en el de Trubia donde vemos la aldea de Caranga de Arriba. En dirección este encontramos las aldeas de Aciera al otro lado de la Sierra de Caranga, Tene bajo la sierra homónima (Pico Airúa) y Bermiego a los pies del Aramo. La del Gorrión hacia el sureste enlaza en el sur con la de Sobia que nos cierra completamente las vistas sur y suroeste. La profunda foz de Valdecerezales, por donde pasan el río Teverga y la carretera AS-228, separa las sierras de Sobia y Gradura. Ésta última avanza por Peña Sala, el Pico Oubiu, Caldoviero y Pico Pelao; más allá está La Loral. Por delante las aldeas de Fabar y Bustiello.
Arista de Peña Collada
Buzón de montaña

Sierra del Gorrión: Peña Mayor, Contutreiru, Granda Mollia y la Rasa de Mingoyo.
 Mientras reponemos fuerzas llegan los compañeros del G.M. Picu Urriellu. Poco paran en la cumbre; prefieren comer abajo. Les seguimos y comprobamos como la sendilla, después de haber subido y bajado por la ella unas 30 personas, está mucho más marcada y fácil de seguir. Quedan comiendo en Michandorio mientras proseguimos hacia el collado La Cochadiella, obviando la ancha pista que baja directa a Santa María. Queremos bajar por el camino antiguo.

Sierra de Tene (Pico Airúa Naval). Por detrás, con nubes, la del Aramo.
Sierra de Caranga
 Como está mucho más marcado, cogemos el camino de arriba y enseguida debemos rectificar para bajar a la senda de abajo, menos perceptible. Tiene algo de maleza pero es fácil de seguir hasta la aldea abandonada de La Collada. Allí encontramos a dos ganaderos que buscan a una yegua con su cría. Nos dicen que esta aldea abandonada tenía casas con horno para amasar y que en realidad se llama Gromolateicha y que el camino de bajada está bastante cerrado por lo que nos aconsejan cruzar un prado y coger otro que baja al fondo del valle San Martín y continúa después por la ladera opuesta.
Camino antiguo que baja a Santa María

Cabaña en La Collada (Gromolateicha).

Hacemos lo que nos aconsejan y accedemos a un camino embarrado, con abundantes piedras sueltas o muy resbaladizas donde están fijas y bastante incómodo. Quizás hubiera sido mejor, como hicieron los del Urriellu, continuar por el antiguo (el que teníamos previsto) que sigue el lomo de la sierra y baja al final en medio del bosque hasta el arroyo.
El camino está tan embarrado que en algunos tramos bajamos en paralelo por el bosque.
 
En otros tramos las piedras mojadas resbalan

Llegando a Santa María. No queda más que bajar por la carretera hasta Las Ventas.
 A partir del depósito del agua el camino es bueno y enseguida nos deja en la aldea de Santa María. Hórreos y paneras, cuadras antiguas y casas nuevas y viejas forman una abigarrada mezcla. A la vez llegan los compañeros del GM y nos dicen que el camino antiguo desde La Collada no está cerrado como nos dijeron los ganaderos, aunque es incómodo de seguir; aunque suponemos que no tanto como el que hemos traído. Un kilómetro y medio de bajada por la carretera, dejando a la derecha las casas de El Toral, nos llevan a la carretera AS-228 en Las Ventas. Y unos metros por ella al cruce de Bustiello.


Lorenzo Sánchez Velázquez