Calzada Romana de Somaconcha, Pico Bustio y Camino Real Reinosa a Santander

Salida y llegada: Bárcena de Pie de Concha (Cantabria)
Distancia: 24,5 km

Duración: 7:00 h (sin paradas)
Subidas acumuladas: 900 m
Altura Inicial: 300 m
Altura máxima: 859 m
Fecha de realización: 18/I/2020
Dificultad: baja
Track de la ruta


Itinerario: Bárcena de Pie de Concha – Calzada Romana o Calzada de los Blendios – Bajada al valle del Bisueña – Río Bisueña – Barranco de los Pozones – Prado de Juan López – Ermita de Nuestra Señora de Somaconcha – Pico Bustio – Pesquera – Río Besaya – N-611 – Camino Real de Reinosa a Santander – Fuente del Rey – Arroyo de la Jurisdicción – Fuente la Regata – Bárcena de Pie de la Concha.

La Calzada de Los Blendios puede ser (aunque no es seguro) un tramo de la antigua calzada romana de la Via Legione VII Gemina Ad Portum Bledium que unía Pisoraca (Herrera de Pisuerga en Palencia) y Portus Blendium (Suances en Cantabria). Se trataría de una importante vía de comunicación entre la costa cantábrica y la meseta. En realidad es un camino antiguo pero no se sabe cual es su origen; debajo de las losas se han encontrado restos de cerámica del XVIII y, por otro lado, su hechura no es como la de los romanos. En esta misma zona se encuentra también el Camino real de las Hoces, tramo que aún se conserva del que se construyó entre 1749 y 1953 para facilitar el transporte de mercancías entre la meseta y los puertos cantábricos. Este camino formaba parte del amplio plan modernizador diseñado por el ilustrado Marqués de la Ensenada, personaje al que se le debería dar un mayor reconocimiento por su ingente labor al servicio del bien público. Para unir ambos recorridos optamos por alargar la excursión adentrándonos en un magníficos bosque en la zona de Los Pozones subiendo además al Pico Bustio en el que encontramos un magnífico mirador sobre las Hoces del Besaya.

Casa solariega en Bárcena de Pie de Concha

Después de este largo preámbulo paso a describir la ruta. Aparcamos a la entrada de Bárcena: magníficas y bien conservadas casas solariegas y palacios incluyendo el del ayuntamiento. Es una maravilla disfrutar de estos pueblos cántabros tan bien cuidados y que por comparación dejan en mal lugar a los de las comunidades vecinas.

Ayuntamiento de Bárcena de Pie de Concha

Cruzamos el pueblo entre sus hermosas casas pasando por la plaza, dejando a uno y otro lado el magnífico ayuntamiento y la iglesia de San Cosme y San Damián (s. XII) y cruzamos el río Besaya. En el barrio de la Picota de Pie de la Concha encontramos la columna o rollo del siglo XVII que servía de marca de jurisdicción y picota para los reos.

Rollo de la Picota de Pie de la Concha

Casona en el barrio de Picota de Pie de la Concha

Un poco más adelante, en el mismo barrio, sale a la izquierda la Calzada de los Blendios de origen incierto, quizás romano. Unos paneles informan sobre su trazado, historia y conservación. Grandes losas irregulares de piedra cubren el camino que sube entre prados y bosquetes, primero en dirección este y enseguida hacia el suroeste. A medida que cogemos altura el amplio valle del Bisueña va quedando atrás.

Camino romano o de los Blendios.

Otra imagen del Camino romano o de los Blendios

Vista atrás de Bárcena de Pie de Concha desde el camino de Los Blendios (Calzada Romana)

Poco después de dejar a la izquierda una cabaña en buen estado desembocamos en una amplia pista al lado de las vías del tren. El camino romano se superpone ahora con la pista y llegaría hasta la ermita de Nuestra Señora de Somaconcha. Como además queremos pasar por el bosque de Los Pozones, cogemos la pista en dirección contraria bajando hacia el oeste mediante varias revueltas hasta alcanzar el fondo del valle recorrido por el río Bisueña. El gigantesco viaducto de la A-67 sobrevuela el valle quedando muy por encima de nuestras cabezas mientras entramos en el bosque.

Bosque de Los Pozones en el entorno del río Bisueña con el viaducto de la A-67 por encima.

 Más adelante pasando por un túnel bajo las vías del tren debemos vadear primero el río Bisueña y después el arroyo de la Valleja. Se puede evitar el vadeo subiendo unos metros hasta el apeadero del tren de Montabliz, cruzando después las vías y un prado con dos cabañas por un paso de servidumbre. Así nos adentramos en el barranco y bosque mixto (robles y hayas sobre todo) de los Pozones por donde sube hacia el oeste una ancha pista que vira después al sur y se revuelve finalmente hacia el este para salir a la campera de Juan López. Allí hay un cruce de caminos a los pies del pico Los Cuetos.

Cabañas en Montabliz por las que pasaríamos para evitar vadear el río Bisueña

Por el barrando de Los Pozones

Zona alta del bosque donde predominan las hayas.

Cogemos el camino de la izquierda que rodea Los Cuetos por el oeste para acercarnos a otro cruce de caminos. Del norte viene el de Los Blendios que dejamos antes, hacia el sur sigue otro, hormigonado, hasta la aldea de Pesquera y hacia el este el que sube al Pico Bustio. Seguimos unos metros hacia el norte para visitar la magnífica ermita o iglesia de Nuestra Señora de Somaconcha donde paramos a reponer fuerzas.

Ermita o iglesia de Somaconcha

 Una vez que hemos dado cuenta de las viandas, regresamos al cruce de caminos y seguimos hacia el este para tomar otro hacia el norte siguiendo la indicación del mirador del Pico Bustio. Más arriba abandonamos el camino ancho y seguimos una senda hacia el este para enlazar con el desbroce de la conducción del gas por la que subimos duramente. Coronamos el pico Bustio. Arriba, a la derecha de la cumbre principal está el magnífico mirador sobre las Hoces del Besaya y el Camino Real.

En la cima del Pico Bustio

Hoces del Besaya desde el mirador del Pico Bustio. Por encima de la carretera se ve el trazado del Camino Real.

Bajamos por el desbroce de la conducción del gas en la ladera sur de la montaña hasta intersectar con un camino que se dirige a una solitaria cabaña. Desde ella bajamos por un senda en paralelo a un prado y pasamos junto a dos edificios de captación o depósitos de agua. En el segundo la senda se pierde y debemos atravesar el prado para salir en la portilla a un camino ancho que nos lleva a la aldea de Pesquera. En la aldea cogemos una carretera secundaria que pasa bajo las vías del tren y desemboca enseguida en la carretera N-611 a la altura del Ventorrillo unos metros después de cruzar el río Besaya.

Vista hacia atrás de la solitaria cabaña que nos sirve de referencia. Al fondo, el Pico Bustio.

Llegando a Pesquera echamos la vista atrás. El Pico Bustios y el prado con vacas que atravesamos

Atravesando el río Besaya vemos el Pico Bustio

Caminamos 1,5 km por la carretera nacional adentrándonos en las hoces del Besaya. El Camino Real Reinosa a Santander sale a la derecha. Empieza a llover haremos el resto de la ruta bajo los paraguas. Con sus mojones laterales, parcialmente empedrado, el camino real se conserva en buen estado sobre todo en el primer tramo. Nada más acceder a él cruzamos una verja metálica y pasamos junto a la Fuente del Rey que aún conserva la inscripción original.

Desde la N-611, a su paso por las hoces del Besaya, tenemos este vista del Pico Bustio.

Camino Real de Reinosa a Santander

Fuente del Rey

Mojones en el Camino Real

Llegando a Bárcena de Pie de Concha

Iglesia de San Cosme y San Damián.

El tramo conservado de este camino real es de unos 5 km y pasaremos por la Fuente Real primero, después cruzaremos el Arroyo de la Jurisdicción, a continuación dejaremos a un lado la fuente y reguero de La Regata y finalmente desembocaremos en la carretera nacional a la entrada de la aldea de Bárcena de Pie de Concha. Aún tenemos luz y tiempo para apreciar la magnífica arquitectura de la Iglesia de San Cosme y San Damián del siglo XII.

Lorenzo Sánchez Velázquez