lunes, 7 de marzo de 2022

Picos Gamonal y Zarreo. Circular desde Bermiego

Salida: Bermiego (Concejo de Quirós)
Distancia: 17.3 km
Duración: 8:00 h (sin paradas)
Subidas acumuladas: 1200 m
Altura Inicial: 760 m
Altura máxima: 1710 m
Fecha de realización: 27/II/2022
Dificultad: media
Track de la ruta




Itinerario: Bermiego – Llano – Llinariega – Moinedo – Brañas de Llinares – Grandivicicha – Ortigales – Vega de la Mortera – Vallina Felgal – Pico Gamonal – Pico Zarreo – Arandanal – Llago Fonpedrín – Valle de Fon Robla – Cagachoneiro – Brañas de Llinares – Desvío a Arroxo – Ermita de la Merced – Llinariega (enlace con pista) – Llano – Tejo de Bermiego y Capilla de Sta María – Bermiego.


Esta vez decidimos subir a la Gamonal del Aramo por la ladera occidental, ruta mucho más exigente que el típico acceso desde El Angliru. Y no sólo por la gran diferencia de desnivel sino también por la agreste orografía que vamos a recorrer en la subida y también en la bajada aunque esto último fue porque quisimos. Esta es la historia de la ruta.

Esta es la imagen (Google Earth) que se ve desde el pico Airúa Naval (ver en esta entrada)

Nos acercamos a Bermiego por la sinuosa carretera que sube desde la AS-229 cerca de Las Agüeras y dejamos el coche en el aparcamiento habilitado a la entrada de la aldea. Entre vetustos hórreos y paneras (algunos del siglo XVI), casas solariegas en distinto grado de conservación y dejando a un lado la Ermita de San Antonio y al otro la fuente de La Fontana, siguiendo las marcas del GR-106 Ruta de San Melchor (que une la aldea quirosana de Cortes con Oviedo), subimos duramente hacia el barrio alto de Llano.

Desde la pista que sube hacia el Pando de la Mortera y Pedroveya echamos la vista atrás: vemos Bermiego y el el barrio de Llano por encima.

La pista, hormigonada al principio, sube (N) entre prados y cabañas y algunos bosquetes, dejando a la derecha el desvío por Arroxo y la Ermita de la Merced (no aconsejable seguirlo por la gran cantidad de maleza que prácticamente la tapa) y a la izquierda el desvío hacia Llinariega. Tras un requiebro a la derecha la pista recibe la salida del camino que viene de la ermita y, un poco más adelante cuando prácticamente llanea en Moiniedo, la abandonamos y con ella dejamos también el GR para que ambos sigan hacia el collado del Pando de la Mortera y a Pedroveya.

Pasado el barrio de Llano la pista avanza entre prados y bosquetes. Vemos el pico Pelitrón del Aramo.

Vista hacia atrás de Bermiego. La bruma de la mañana y el humo de las quemas nos dan una pobre visibilidad. Vemos el Pico Mayor de la Sierra del Gorrión y a sus pies la aldea de Toriezo.

Seguimos otro camino ancho que sale a la derecha en ángulo agudo, virando enseguida a la izquierda para proseguir hacia el norte a mayor altura hasta las Brañas de Llinares donde finaliza. Por encima de la última cabaña hay una fuente con pilón que nos servirá de referencia para coger la marcada senda que sube fuertemente hacia el borde occidental de la gran meseta del Aramo.

Encrucijada de caminos. El pico que vemos es la Airúa Naval (Sierra de Tene), el collado Pando de la Mortera en medio y a la derecha las Brañas de Llinares hacia donde nos dirigimos.

Zona alta de las Brañas de Linares. A la dcha de la cabaña arranca la canal de subida. A la izda la Airúa Naval.

La corta canal que remontamos da paso a una amplia e inclinada ladera por la que sube la senda que pronto se divide en sendillas que va haciendo el ganado. No obstante la orientación es clara: hacia arriba, hacia el evidente collado. Nos situamos así en el borde occidental de la sierra y podemos ver desde allí la silueta de La Gamonal aparentemente cercana. Sin embargo esta visión es engañosa. Entre nuestra posición y la montaña hay que atravesar un agreste relieve kárstico salpicado de jous (hondonadas), lapiaces, aristas calizas, etc que hacen muy difícil la progresión y también la orientación en caso de niebla. Recorrer estos parajes, incluso con cielo despejado, hace aconsejable el uso de un buen sistema de orientación.

Vista hacia atrás desde el arranque de la canal de subida a la sierra. Vemos la última cabaña de las Brañas de Llinares y el depósito de agua que alimenta el pilón ganadero (en medio de la foto).

Desde lo alto de la canal miramos hacia atrás.

Llegando a lo alto de la sierra (vista hacia atrás).

Desde el borde occidental de la Sierra del Aramo vemos el pico Gamonal. Aparentemente la subida es fácil, pero en medio hay un relieve kárstico de orografía muy compleja. lo rodearemos por la izda de la foto siguiendo sucesivas franjas de hierba y rodeando varios "jous".

Lo más directo sería intentar subir por Llagu Seco, pero es justo por donde se ve un relieve más caótico. Por ello, aunque nos suponga un rodeo vamos a encaminarnos hacia la Vega de Mortera al norte. Bajamos unos metros y por franjas herbosas seguimos trochas del ganado (N) que pace por estos lugares virando al este a la altura del pico Ortigosa. En el entorno de este pico encontramos el tramo más escabroso pero si seguimos fielmente el track que adjunto no tendremos ninguna dificultad.

Entrando en la zona más intrincada. Al izda el Pico Ortigosa que rodearemos por la derecha.

Uno de los "jous" que rodeamos.

Seguiremos de frente para rodear después la peña y caer sobre la Vega de la Mortera.

Superado este punto una franja de hierba que rodea varios jous nos reorienta al norte y desemboca en la amplia pradera de la Vega de la Mortera. Como no queremos bajar a la vega porque luego tendríamos que recuperar los metros perdidos, viramos al este rodeando el valle en ligero descenso pero justo en el límite con las peñas. De esta manera alcanzamos una empinada canal por la que progresamos sin ninguna complicación hasta salir a la amplia Vallina Felgal. Larga se hace la remontada por la amplia vallina hasta casi alcanzar la Collada Bermeja que separa La Gamonal del Pico Monrrasiellu.

Al entrar en la amplia Vallina Felgal miramos hacia atrás: abajo la Vega de la Mortera.

Vallina Felgal. A la derecha el Pico Gamonal a la izda quedaría el Monrrasiellu y en medio la Collada Bermeja.

Algunas manchas de nieve dura tapan la sendilla de subida normal a La Gamonal desde este lado. Por ello nos vamos hacia limpia arista noreste por la que progresamos hasta las peñas cimeras que superamos fácilmente usando algo las manos. La cima debería ofrecernos vistas formidables en todas las direcciones, pero entre las nubes que tapan en parte la cordillera y algunas humaredas provocadas por fuegos que se quedan en los valles, la visión es bastante pobre; tan sólo hacia el norte se ve nítido el resto de la sierra. Dejo algunas fotos obtenidas en otras ascensiones.

Algunas manchas de nieve muy dura hace que subamos a La Gamonal por la arista que arranca a la izda.

Cima de La Gamonal.

Vista norte desde La Gamonal

Vista hacia el sur desde La Gamonal

Continuación de la panorámica anterior hacia el suroeste. Bajaremos de La Gamonal y seguiremos la arista hacia el Pico Zarreo.

Como vamos bien de tiempo y de ganas, en lugar de bajar por el camino normal al valle de Valdesiniestro y al Angliru, decidimos hacer la escarpada arista que nos separa del Pico Zarreo al sur. Bajamos por la ladera suroeste y enfilamos la citada arista. Es bastante escabrosa y complicada de caminar. No hay senda ni hitos y hay que ir superando poco a poco crestones y peñas, poniendo mucho cuidado en donde pisamos y ayudándonos de las manos en algunos puntos. Empleamos unos 40 minutos en hacer unos 600 metros. En la cima del Pico Zarreo paramos a comer.

Vista hacia atrás desde la arista que une La Gamonal con el pico Zarreo.

Esta vista de la arista refleja mejor lo escarpado del terreno.

La Gamonal desde el Pico Zarreo y la arista que hemos recorrido.

Desde el Pico Zarreo tenemos esta vista de la vertiente occidental del Aramo. Subir por ahí directamente a La Gamonal (que queda a la derecha) se ve complicado.

Bajamos por la ladera sur del Zarreo, primero por un corto canchal y después por una ladera mixta de piedra y hierba sin ninguna dificultad hasta acabar en la amplia vega de Arandanal, vega que viene desde El Angliru. Seguimos la marcada senda que recorre la vega hasta el Llago Fonpedrín que encontramos completamente helado. Se trata de una presa o lago recrecido que da servicio al pilón ganadero que hay por debajo. El estanque está alimentado por una gruesa manguera que viene desde la zona del Angliru.

Vista desde el Pico Zarreo hacia el Arandanal (adonde tenemos que bajar). Por detrás vemos el Pico Moncuevu.

Por esta pedregosa ladera bajamos del Zarreo. Es un tramo corto, el resto es pradera.

Pico Zarreo desde el Arandanal. Por esa ladera hemos bajado.

Lago de Fonpedrín (helado). Al fondo vemos el Pico Zarreo y La Gamonal.

La senda se orienta hacia el suroeste superando un pequeño crestón y bajando hacia otra campera, el Valle de Fon Robla, por donde continúa en suave descenso dejando a la derecha una cueva (más bien oquedad) que debe servir de cobijo a los animales. Finalmente se accede a la Vega de Cagochoneiro. Desde ahí vemos al norte un gran hito que marca la bajada por Amor de la Cochá, pero para llegar hasta allí deberíamos subir por una herbosa y amplia canal. No seguiremos esta opción.

Después de Fonpedrín vamos bajando por sucesivas vegas hasta el borde la sierra en Cagachoneiro.

En la penúltima vega encontramos esta cueva (más bien oquedad).

Nos asomamos al borde occidental de la sierra en Cogachoneiro donde un hito nos informa de la otra bajada (que no requiere ninguna subida previa). Al principio de la bajada la senda está difuminada y, aunque sabemos que hay que faldear la ladera hacia el norte (derecha), bajamos demasiado y tenemos que remontar unos metros para encontrar la senda (he modificado el track para evitar ese error).

Desde la Ermita de la Merced tenemos esta vista del Collado Cagachoneiro. La senda va al principio por arriba, pegada a las peña que se ven en el centro.

La marcada senda se orienta al norte faldeando la ladera en suave y cómodo descenso. Más adelante, después de superar por arriba algunos pequeños pedreros y un crestón por debajo, la senda enlaza con la que baja de Amor de la Cochá y juntas prosiguen hasta una pequeña campera donde da un par de pequeña revueltas para perder altura. Finalmente la senda se divide en varias pero todas bajan claras aunque entre cotoyas hasta la pista en la que se asiente el GR-106 a la altura de Moinedo.

Desvío hacia la Ermita de la Merced por Arroxo.

Bajamos unos metros por la pista y cogemos el desvío hacia Arroxo para visitar la Ermita de la Merced; el camino ancho hasta la ermita está limpio y es llano. Una vez allí podríamos retroceder unos 200 metros hasta la pista y bajar por ella pero, aunque lo vemos algo cerrado, decidimos bajar por el antigua camino. Error. Está muy cerrado, inundado en algunos tramos y en otro tramo es tanta la maleza que debemos bajar por un prado. En fin… que no aconsejo a nadie bajar por este camino, aunque sólo sean unos 500 metros.

Ermita de la Merded

Saliendo a la pista del atajo por Arroxo (está muy cerrado por la maleza)

Llegando a Llano y a Bermiego.

Tejo de Bermiego y Capilla de Santa María.

Capilla de Santa María junto al Texu de Bermiego.

Desde el mirador de la Capilla de Santa María tenemos esta preciosa vista de Bermiego y los picos Champaza y Peña del Alba.

Fuente en Bermiego.

Salimos a la pista y descendemos por ella hasta el barrio de Llano. Como queremos visitar el tejo y la capilla no bajamos al centro de Bermiego sino que, una vez atravesado el barrio, seguimos un camino (O) que ataja unos metros y desemboca en la carretera que lleva hasta el tejo. Visitamos el hermoso y frondoso tejo, la Capilla de Santa María y hacemos unas preciosas fotos desde su mirador hacia Bermiego y la ladera suroeste del Aramo. Por la carretera desandamos los 500 metros que nos dejan de nuevo en Bermiego y volvemos a pasar junto al lugar que ocupaba el Roble de Bermiego (Rebollu o Rebollón de Bermiego). Sólo queda el panel informativo porque en abril de 2014 se desenraizó como consecuencia de las fuertes lluvias y murió. Como consecuencia, un año después se derogó el decreto por el que había sido declarado monumento natural. Una pena.


Lorenzo Sánchez Velázquez

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